Con el otoño, adiós,
amor mío, llegó el otoño.
Marinero soy en el mar al que voy,
inmenso dolor por ti, mi amor.
Ni el viento ni el frío me hacen
olvidarte, mi gran amor.
Alegría, risas, felicidad,
la fiesta acaba de empezar.
Empiezan los músicos el cantar:
"Granada, Granada, Granada y su Albaycín con los gitanos,
rugen al viento
insuperables voces cantando con alegría
al Cristo de los Gitanos.
Con el sol y el agua crecen las flores,
ojalá seas tú la flor de mi vida.
Ráfagas de agua y sol echo en mi corazón,
jazmín, rosas, azucenas y pétalos de loto,
espero que tú nazcas también en él.
J. I. Vílchez C.,
6º A, 10 años.