En la calle de mi
amigo Adrián hay una tienda de deportes que se llama "Sport Thierry". Un
sábado, un bebé de 1 año quería ser futbolista. LLegados a la tienda, la madre y el bebé, el dueño recibió encantado al
niño. A éste le gustaron unas zapatillas, pero no había de su talla, y, por
casualidad, el niño vomitó encima del dueño que era un poco cabezón.
-Esto es intolerante. Entra un bebé por la
puerta y tiene la poca vergüenza de vomitarme.
La hermana del dueño le dijo que se tranquilizara pero
el siguió diciendo:
-Lo primero que os voy a mandar es que recojáis el
vomitado. Lo segundo es que os deis la vuelta y lo tercero es que os voy a
mandar a "tomar vientos".
Del enfado que pilló se puso enfermo y cerró la tienda
durante una semana.
Félix R.
de la F.,
6ºB, 11 años.